¡Ya hemos llegado a mi charca favorita Hopper! No es que quiera tirar para mi tierra, sino porque estoy seguro de que es uno de los pueblos más bonitos de España, ¿aún no sabes a cuál me refiero?
Efectivamente, hoy hablaremos sobre qué ver Ronda.
La tierra de los bandoleros a casi 800 metros de altura y bordeando la ciudad desde donde escribimos esto, Málaga.
Si por algo eligieron estas tierras personajes tan conocidos en Andalucía como el Tempranillo (que no me refiero al vino), Pasos Largos o Zamarrilla, es por las magníficas montañas que rodean a Ronda, haciendo de éste territorio un lugar ideal para sus asaltos.

Pero tranqui, que esta rana no pretende robarte nada, tan solo beberemos vino juntos porque si algo también caracteriza a esta zona son sus bodegas.
Como la bodega Doña Felisa en Ronda, donde nos pondremos como dicen aquí ‘puos’ y saldremos ‘croando bajito’.
Pasear por un viñedo como este, es una experiencia magnífica tanto para el extranjero como para los propios locales que nunca han disfrutado de las maravillosas vistas del terreno rondeño. Además, podrás aprender sobre el embotellado y crianza, aunque para que nos vamos a engañar lo importante de aquí es degustar las diferentes variedades de vinos elaborados en Ronda.
Si te quieres llevar un recuerdito de la localidad, yo soy de llevarme comida, y fan de su Cloe rosado de esta bodega. Pero con cualquiera acertarás, tú déjate aconsejar que ellos sabrán cual debes llevarte a casa.
No hay mejor modo de empezar un magnífico fin de semana en Ronda, aunque ya te digo que te va a faltar tiempo, porque querrás recorrer cada rincón de la comarca.
¿Qué hacer en Ronda?
Si el cuerpo nos lo permite después de la ‘tajada’, podremos recorrer el barrio de San Francisco, al otro lado de las murallas árabes es una de las zonas con más encanto de la ciudad del Tajo. Por cierto, si tienes que aparcar el coche por aquí puedes tener suerte, palabra de rana.
No solo es el lugar ideal para ir de tapas por Ronda, también es hogar del convento que da nombre al barrio, el Convento de San Francisco y cuya particularidad además de su puerta de estilo plateresco, es que fue construida en el mismo lugar donde Fernando el Católico el 20 de Mayo de 1485 asaltó la ciudad para poner fin a la dominación árabe de Ronda.
Más tarde una vez construido el convento en el siglo XVI, las tropas francesas en la Guerra de la Independencia la destruyeron, aunque posteriormente se reconstruyó. Hoy en día, solo se conserva la Iglesia de estilo gótico-mudejar.
Y sigo en modo historiador Hopper, porque cruzaremos la Puerta de Almocábar del siglo XIII, cerca del antiguo cementerio musulmán. De ahí su nombre ya que proviene de ‘Maqbara’, que es la denominación de las necrópolis musulmanas.
El primer gran edificio que veremos aquí será la Iglesia del Espíritu Santo.

Prepara esas ancas, porque habrá que esforzarse para llegar a su campanario, aunque entenderás por qué se utilizó como zona defensiva de Ronda.
Y después de descubrir las leyendas que rodean a este edificio, como su placa donde los rondeños dicen que Fernando el Católico dejó la huella de su corcel cuando entraba por la ciudad, tocará bajar a la Plaza del Ayuntamiento.
Aquí tendremos además del edificio mencionado anteriormente, el Santuario de Maria Auxiliadora y el Convento de las Clarisas, pero es interesante sobre todo acercarse a la Real Colegiata de Santa María la Mayor.

Siglos tardaron en acabar este edificio construido sobre una de las mezquitas que por aquí se encontraban, pero por suerte no les quedó tan mal el resultado y te pueden quedar fotos muy interesantes aquí.
No te pierdas los baños árabes de Ronda.
Después de perderte por las adoquinadas calles de esta localidad malagueña, nos dirigimos a la antigua judería datada de entre los siglos XIII y XIV.
Aquí el gran trabajo de la arqueología permitieron rescatar 3 salas de baño y sus cubiertas comunicadas por arcos de medio punto, conservando su estructura y siendo por ello uno de los mejores baños árabes conservados en España.
Aunque con las pasadas inundaciones se vio gravemente afectado su exterior, no impedirá que disfrutes de la visita.

Por cierto Hopper, lleva suelto porque entrar aquí tiene un coste de 3.5€ o 2.75€ si eres un renacuajo menor de 26, eso sí para residentes, menores de 14 y personas con diversidad funcional es gratis.
¿No estas cansado? Pues al lío porque llegamos a lo gordo de Ronda, no podía faltar en este artículo…
El Tajo de Ronda.
Aunque su verdadero nombre es Puente Nuevo, cuidado si pasas con el coche por aquí, porque a mi me han empapelado sin querer, gracias Google Maps 🙂
Te vas a ir las ancas abajo cuando te asomes por sus ventanales y pongas la vista en el Guadalevín, pero si quieres verlo de lujo, pásate por los miradores de la Plaza de España o de la calle Ernest Hemingway en la zona nueva de ciudad.
Si te apetece ir de ruteo, entonces baja el Tajo por el Camino de los Molinos y ya desde ahí flipa en colores, sobre todo en Primavera, aunque cuidao si tienes alergia.

Si ya estás planeando tu escapada a Ronda pero necesitas ayuda buscando alojamiento y quieres los consejos gratuitos de esta rana en tu WhatsApp, pulsa el siguiente botón y me pongo ancas a la obra.
Y un poquito más alejado, pero de visita también obligatoria es la antigua ciudad romana de Acinipo, está a 20km de aquí pero su teatro romano vivo y la tranquilidad del lugar, te harán flipar.
Rematamos todo lo que hacer en Ronda con este vídeo de Canal Sur Televisión, pero no te vayas muy lejos que ahora tenemos que comer.
Vale crack, pero estoy que me como las patas como los pulpos, ya va siendo hora de llevarse algo al estómago.
¿Dónde comer en Ronda?
Hablar de comer aquí es hablar de tascas, de tapas, de una cañita, su montaito o boquerones en vinagre, déjate de ser tiquismiquis porque para eso ya te bajarás a Marbella.
Se me hace la boca agua solo de pensar en el Lechuguita en Ronda.
Me pongo a croar de felicidad pensando en el rollazo andaluz que transmite este sitio, no solo por su decoración del Betis – que se la perdono porque Joaquín jugó en el Málaga- sino también porque aquí raro es el que no se arranca a cantar, aunque digan que no se puede.

Bueno, quizás antes me he pasado de salto y buscas una cena especial para este finde romanticon que te estás metiendo, quieres tener el detalle y has dicho, vamos a un Estrella Michelín.
Si hablamos de la guía y Ronda, tenemos que hablar de Benito Gómez, catalán de nacimiento pero rondeño de corazón junto a su restaurante Bardal.
Una manera diferente de probar la comarca, jugando con las sorpresas en boca y dejando claro desde el principio el lugar en el que te encuentras.

Si amas la producción local, sostenible y ecológica además de la alta cocina, no puedes dejar la oportunidad de pegarte el capricho en este restaurante.
Y si quieres rematar la escapada a pocos kilómetros de Ronda tienes Setenil de las Bodegas.
Aunque le dedicaremos una publicación integra a estos pueblos que rodean la zona, este perteneciente a la Ruta de los Pueblos Blancos es de los más bonitos.
Además de por su emplazamiento, es famoso por sus viviendas construidas bajo un saliente de roca, siendo uno de los lugares más originales que podrás visitar en Andalucía.
Con esto ponemos fin a este post donde hemos visitado los rinconcitos de Ronda, recuerda que si necesitas planear tu próxima escapada a Ronda, Hoppi está a tu disposición en WhatsApp.